Naturaleza

Ornitorrinco, nuestro pariente más cercano

A. Sabrido
Vive la mayor parte del tiempo dentro del agua y parece un topo con pico y patas de ánade y cola de castor. Pone huevos y es un mamífero, pero para los científicos está más cerca del reptil que de cualquier otra especie.
Su genoma, recientemente descifrado, le convierte en el animal conocido más diferente de los humanos.La revista Nature dio cuenta recientemente de que el ornitorrinco o platipo, (Ornithorhynchus anatinus), y los seres humanos comparten el 80 por ciento de sus genes, y el resto es un amalgama que le convierte en un ser verdaderamente excepcional en la creación.
Una curiosidad: posee los genes que producen veneno en los reptiles, pero no lo puede inocular al morder, porque carece de dientes.

Un equipo internacional, formado por investigadores de todo el mundo, incluidos españoles de la Universidad de Oviedo, ha sido quien se ha encargado de descubrir que el ornitorrinco es el pariente más lejano de los humanos.

Pertenece a la familia de los monotremas –junto al equidna-, así llamada porque el mismo conducto les sirve para evacuar los desechos de la digestión y para el sistema urogenital.Se cree que los monotremas son el grupo de mamíferos que antes se separó del tronco común, seguido de los marsupiales, aunque estos, a diferencia de los ornitorrincos, no ponen huevos.

En lugar de poseer un par de cromosomas sexuales, como en los demás mamíferos, el ornitorrinco posee 5 pares dedicados a la determinación sexual, siendo el cromosoma X más similar al cromosoma Z de las aves y no al cromosoma X de los otros mamíferos.

Otra particularidad: no tiene casi estómago y carece de las enzimas digestivas, un rasgo que es más propio de los peces que de los mamíferos. El animal es nativo del Este de Australia y la isla de Tasmania.

Se mantiene la mayor parte del tiempo nadando en los ríos y lagos de agua dulce. Se oculta en túneles que excava en la ribera, al modo de los topos, con los que guarda cierto parecido.

En esos túneles construye su nido para depositar los huevos.Difícil de observar, es más activo durante la noche, siendo las horas antes del amanecer y después de anochecer cuando normalmente sale a comer. Por el día sólo puede ser observado descansando en las orillas de ríos y arroyos.

MUY VORACES

Se alimenta de plantas que crecen en el fondo del agua, lombrices, renacuajos, crustáceos y otros invertebrados. Son muy voraces, hasta el punto de que en una noche pueden ingerir el equivalente a su propio peso.

Su nombre quiere decir pico de pájaro y proviene del griego (ornitos, pájaro, y rincos, pico).Le cubre una densa capa impermeable de pelo muy suave de color pardo en las regiones dorsales y blanco amarillento o grisáceo en las ventrales.

Los científicos han descubierto recientemente que su olfato le permite detectar olores bajo el agua, por genes que comparte con perros y roedores.

Su curioso hocico se parece al pico de las patos, pero no es rígido sino flexible, correoso y suave al tacto, de consistencia carnosa y cubierto por piel desnuda. En él se abren los orificios nasales y se disponen multitud de receptores sensoriales capaces de captar campos eléctricos producidos por las posibles presas bajo el agua, este sentido se denomina electrolocación.

La cola es ancha y plana, a modo de remo o pala. Parecida a la del castor, pero a diferencia de éste que la emplea para propulsarse, el ornitorrinco sólo la utiliza para maniobrar en el agua. Además tiene importancia como almacén de grasa que le sirve de reserva energética.

No se considera una especie amenazada, porque es muy común en gran parte de los territorios por los que se distribuye, pero las poblaciones de las regiones más septentrionales parecen ser vulnerables por el aumento de los regadíos, que reducen y su hábitat.Las normas de exportación son muy rigurosas, por lo que sólo puede verse en Australia.