lunes, 23 de noviembre de 2009

Urgente - Noticias de Escalona

Se derrumba una pared de las obras del Centro de Día

Escalona.- Un trabajador ha resultado herido hoy al derrumbarse una de las paredes de las obras que se realizan en el Centro de Día, en la Plaza Mayor, aunque por fortuna las consecuencias no han sido de gravedad.
Testigos presenciales informaron a El Correo de que la pared derrumbada aparentaba no haber sido apuntalada y de que su caída causó considerable alarma entre quienes se encontraban en el lugar.
El único afectado ha sido un trabajador de origen africano, empleado de la empresa portuguesa a la que le han sido adjudicadas las mencionadas obras.
Curiosamente, en estos mismos días se ha descubierto en esas mismas obras un aljibe de mampostería, con apariencia de gran antiguedad, que según testigos presenciales fue ordenado tapar por algún responsable de las obras, y se ignora si se ha solicitado el correspondiente estudio arqueológico antes de proceder en cualquier sentido.
Por el tipo de construcción, las mismas fuentes estiman que pudiera tratarse de un vestigio de la época musulmana de Escalona, lo que equivale a los tiempos en que fue construida la primera fortaleza o alcazaba en Escalona, en el mismo emplazamiento que ocupa ahora el Castillo-Palacio de Don Álvaro de Luna.
Este periódico ha intentado sin éxito hasta el momento comunicar con los servicios de Bellas Artes para averiguar si se ha formulado la correspondiente consulta arqueológica, con vistas a evitar en su caso la destrucción de un importante vestigio histórico.
No es la primera vez que al realizar obras de construcción en Escalona se encuentran vestigios de las distintas etapas de la historia de la localidad, algunas de las cuales están hoy exhibidas en el toledano Museo de Santa Cruz. En tre estas han sido frecuentes las de origen musulmán.
Escalona fue una importante plaza fuerte de la taifa toledana durante la dominación árabe de la Península, hasta el punto de que el rey Alfonso VI luchó para arrebatar la Villa a los musulmanes en 1083 y desde ella organizó más tarde la reconquista de Toledo, asediada durante cuatro años y rendida pacíficamente al mismo monarca el 25 de mayo de 1085.