TOLEDO.- El presidente regional, José María Barreda, ha asegurado que los momentos de dificultad económica no afectarán a las ayudas complementarias de las pensiones de viudedad de las que "no rebajaré ni un céntimo".
Barreda ha hecho esta aseveración en Consuegra, donde presidió la XXXV Asamblea de Asociaciones de Viudas de Castilla-La Mancha y ha querido tranquilizar a los castellano-manchegos a quienes ha dicho que en momentos complicados, como el actual, los recursos destinados a colectivos más necesitados no sufrirán recortes.
"Las rebajas las haremos en otras cosas, pero nunca en lo que destinamos a viudas, dependientes, mayores, salud y educación", insistió Barreda, que aprovechó su encuentro con más de 1.200 viudas para recordar el importante papel que juegan en Castilla-La Mancha y la necesidad de que apoyen el gran pacto que ha lanzado a toda la sociedad de la Región para combatir la crisis.
"Os ofrezco este esfuerzo compartido con los brazos abiertos porque todas las ayudas son importantes, nadie tiene el monopolio de la verdad y nadie puede hacer solo lo que se debe hacer entre todos", apuntó Barreda, que solicitó "humildemente" la colaboración del colectivo de viudas de Castilla-La Mancha.
En este sentido, el presidente regional recordó que tanto empresarios como sindicatos ya han dicho que sí, en un ejemplo de responsabilidad, pero, recordó que este llamamiento va dirigido también
a los partidos políticos "porque todos ahora tenemos que remar en la misma dirección y aparcar nuestras diferencias en un ejercicio de pedagogía política.El jefe del Ejecutivo autonómico, que también recordó el Plan de Choque diseñado para aquellos trabajadores que se han quedado sin prestaciones por desempleo, insistió en la importante labor que realiza el colectivo de viudos y viudas, agrupados en la región en 37 asociaciones que representan a unas 4.000 personas.
Barreda recordó también que la primera medida que tomó el Gobierno regional en 2007 fue dar ayudas complementarias a personas viudas que recibían las pensiones más pequeñas. Son, explicó, más de 39.000 las castellano-manchegas que reciben este complemento de entre 400 y 1.000 euros y que en total llega a 17 millones de euros.
"Yo quiero que mis paisanas sepan que para el Gobierno regional lo prioritario es que los últimos sean los primeros, y en las prioridades de gasto está, en primer lugar, la salud, la educación, la universalización de las pensiones y ahora también la atención a la dependencia", ha dicho.
