viernes, 25 de septiembre de 2009

Noticias Regionales

La posible fusión con BBK dispara la tensión política sobre CCM
Madrid.- Las especulaciones sobre la posibilidad de que el Gobierno favorezca la fusión de Caja Castilla-La Mancha (CCM) con BBK a cambio del apoyo del PNV a los presupuestos generales del Estado ha vuelto a encender la polémica política alrededor de la entidad castellano-manchega, la primera intervenida desde que empezara la crisis.
Tanto el PSOE como el PNV han negado tajantemente esta posibilidad. Los socialistas aseguraron ayer que la fusión de CCM se hará con criterios económicos y no políticos y han atribuido los rumores a “intoxicaciones interesadas”. Aún así, la presidenta popular en Castilla-La Mancha , María Dolores de Cospedal, advirtió que el PP no apoyará esta fusión si se hace a cambio de favores políticos. Los sindicatos han pedido a la Dirección de la caja que aclare qué hay de real alrededor de la posible integración con BBK. De no recibirla, amenazan con movilizaciones.
Las cajas interesadas en integrarse con CCM tendrán acceso a toda la información sobre la entidad desde el 5 de octubre, según informó el diario EXPANSIÓN el pasado miércoles. Entre las favoritas, tanto por su tamaño como por su solvencia, ya que cuentan con un importante exceso de recursos propios, están BBK e Ibercaja. Otras fuentes incluyen también a Kutxa .
Todo el sector de cajas se mueve al son de la consolidación. A raíz del anuncio de Caja Cantabria de que está explorando proyectos de integración con otras cajas, la prensa regional publicó ayer que los posibles compañeros de baile podrían ser Caja Navarra, Cajastur y Caja Rioja.
CAN ni confirma ni desmiente: “Queremos ser activos en el proceso de consolidación y conversaciones hay a todos los niveles”, dijo ayer un portavoz. A su vez, Cajastur afirmó que “está atenta a todas las oportunidades del mercado.” .
En todo caso, esta unión no sería una fusión, sino un SIP (sistema integrado de protección), una fórmula que algunas entidades quieren usar para reforzar su solvencia, compartiendo riesgos, pero manteniendo su independencia. El sindicato Comfia CCOO advirtió ayer que sólo apoyaría un SIP si respetara la naturaleza jurídica de las cajas, la autonomía de gestión y garantizara un protocolo de empleo.
Sin embargo, el mensaje que el Banco de España ha trasmitido a las cajas es que las integraciones que busca tienen que ser irreversibles y garantizar una optimización de la capacidad productiva, según las fuentes consultadas.
Otra posible fusión de la que se sigue hablando, a pesar de los desmentidos de las interesadas, es la de Caja Murcia y CAM. Ayer, el sindicato CGT denunció que la unión provocaría una fuerte reducción de empleo.Por otro lado, Unicaja y Caja Jaén constituirán la próxima semana la mesa laboral de la fusión.