Caza al asesino en Mallorca
Palma.- La Policía, convencida de que los asesinos de dos guardias civiles aún siguen en Mallorca escondidos, y con las identificaciones de dos sospechosos, ha estrechado el cer
co y ha lanzado la mayor operación de caza al terrorista que se recuerda, en la que participan 1.600 agentes.
No se recuerda nada parecido en la isla en ese intento de detener a los pistoleros de ETA que asesinaron el jueves con una bomba lapa a los guardias civiles Diego Salvá Lezaún y Carlos Sáenz de Tejada.
La Guardia Civil tomó el control del puerto y ningún barco se movió sin su autorización. Todas las listas de pasajeros eran sometidas a un severo rastreo informático que obligaba a retener a los viajeros en los ferrys durante a una hora, una vez cerrado el embarque.
Todo y mucho más para echar el guante a los dos sospechosos identificados, cuya busca continúa por cada rincón de la isla. Porque la principal hipótesis con la que trabajan las Fuerzas de Seguridad es que los etarras todavía están en Mallorca.
Según Radio Nacional, los sospechosos buscados serían una pareja que estaba alojada en un apartamento cerca del paseo marítimo de Palma. Hablaban en vasco y desde el pasado jueves, día del atentado, no se sabe nada de ellos.El delegado del Gobierno en Baleares, Ramon Socías, al dar detalles de la investigación, ha revelado que la hipótesis más fuerte de las Fuerzas de Seguridad es que los terroristas “no habrían abandonado la isla, sino que estarían refugiados en algún piso e intentarían esperar a que se enfríe la situación”. Socías apuntó también que los terroristas aguardan para escapar aprovechando la gran afluencia de personas de los aeropuertos y puertos
de Baleares debido a las vacaciones de verano. “Vamos a ponerles lo más difícil posible su salida de la isla”, aseguró.El delegado del Gobierno ha dicho que se mantienen los “controles exhaustivos” en todas las salidas de Mallorca, tanto en el aeropuerto de Palma como en el aeródromo de Son Bonet, así como en los puertos de la comunidad autónoma y en todos los puertos deportivos, “para que nadie abandone la isla sin haber sido identificado correctamente”.
El asesinato y el atentado de un día antes en Burgos motivaron masivas concentraciones en toda España en repulsa de los crímenes de la banda de asesinos.
Al parecer, la colaboración ciudadana ha sido fundamental para identificar a los posibles autores del atentado de Mallorca, que se produjo en una zona turística a escasos siete kilómetros del lugar donde veranea la Familia Real, cuyos miembros llegarán hoy a Palma según lo previsto.
Además, se ha sabido que el Ministerio de Interior temía hace semanas algo de estas características. La base era una conversación interceptada en el sur de Francia entre dos miembros de la organización terrorista en la que uno de ellos le aseguraba triunfante al otro que la banda preparaba "un petardazo más grande que el de la T4".
co y ha lanzado la mayor operación de caza al terrorista que se recuerda, en la que participan 1.600 agentes.No se recuerda nada parecido en la isla en ese intento de detener a los pistoleros de ETA que asesinaron el jueves con una bomba lapa a los guardias civiles Diego Salvá Lezaún y Carlos Sáenz de Tejada.
La Guardia Civil tomó el control del puerto y ningún barco se movió sin su autorización. Todas las listas de pasajeros eran sometidas a un severo rastreo informático que obligaba a retener a los viajeros en los ferrys durante a una hora, una vez cerrado el embarque.
Todo y mucho más para echar el guante a los dos sospechosos identificados, cuya busca continúa por cada rincón de la isla. Porque la principal hipótesis con la que trabajan las Fuerzas de Seguridad es que los etarras todavía están en Mallorca.
Según Radio Nacional, los sospechosos buscados serían una pareja que estaba alojada en un apartamento cerca del paseo marítimo de Palma. Hablaban en vasco y desde el pasado jueves, día del atentado, no se sabe nada de ellos.El delegado del Gobierno en Baleares, Ramon Socías, al dar detalles de la investigación, ha revelado que la hipótesis más fuerte de las Fuerzas de Seguridad es que los terroristas “no habrían abandonado la isla, sino que estarían refugiados en algún piso e intentarían esperar a que se enfríe la situación”. Socías apuntó también que los terroristas aguardan para escapar aprovechando la gran afluencia de personas de los aeropuertos y puertos
de Baleares debido a las vacaciones de verano. “Vamos a ponerles lo más difícil posible su salida de la isla”, aseguró.El delegado del Gobierno ha dicho que se mantienen los “controles exhaustivos” en todas las salidas de Mallorca, tanto en el aeropuerto de Palma como en el aeródromo de Son Bonet, así como en los puertos de la comunidad autónoma y en todos los puertos deportivos, “para que nadie abandone la isla sin haber sido identificado correctamente”.El asesinato y el atentado de un día antes en Burgos motivaron masivas concentraciones en toda España en repulsa de los crímenes de la banda de asesinos.
Al parecer, la colaboración ciudadana ha sido fundamental para identificar a los posibles autores del atentado de Mallorca, que se produjo en una zona turística a escasos siete kilómetros del lugar donde veranea la Familia Real, cuyos miembros llegarán hoy a Palma según lo previsto.
Además, se ha sabido que el Ministerio de Interior temía hace semanas algo de estas características. La base era una conversación interceptada en el sur de Francia entre dos miembros de la organización terrorista en la que uno de ellos le aseguraba triunfante al otro que la banda preparaba "un petardazo más grande que el de la T4".
