domingo, 21 de marzo de 2010

Cultura

Mañana se inaugura en Madrid la exposición “Marañón y su tiempo”

Madrid.- Una exposición dedicada a recordar al doctor Gregorio Marañón, con motivo del cincuenta aniversario de su muerte, será inaugurada el lunes en la Biblioteca Nacional, en Madrid, donde permanecerá abierta hasta el 30 de mayo.
La muestra, que lleva el título de ‘Marañón y su Tiempo’ pasará con posterioridad a la Biblioteca y Archivo de Cantabria (Santander) desde el 1 de julio al 29 de agosto, para exhibirse en Toledo (Centro Cultural San Marcos) desde el 20 de septiembre al 12 de diciembre de este mismo año.
Organizada por la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales y bajo la supervisión del catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad Complutense de Madrid3, Juan Pablo de Fusi Aizpurúa, la muestra recorre la biografía y el legado intelectual y científico de Gregorio Marañón, de gran vinculación con Toledo4.
Reúne fotografías, manuscritos, cartas, material científico, obras de arte y libros de y sobre Marañón y su época. Se ha elaborado un hilo narrativo que trata de presentar las diferentes facetas que abarcó el doctor Marañón de manera plástica y documental. La exposición cuenta con 237 obras: 36 pinturas, 6 esculturas, 47 documentos, 18 dibujos, 1 audiovisual, 31 fotos, 38 libros, otros materiales (18); 25 piezas inéditas y 3 piezas restauradas.
Entre las piezas más destacadas se encuentra: “Los amigos” de Ignacio Zuloaga5; los retratos de Marañón pintados por Zuloaga; las 4 obras de la Hispanic Society of America (Nueva York) vistas muy pocas veces en España (cuatro pinturas de Joaquín Sorolla6): Marcelino Menéndez Pelayo (1908), Gregorio Marañón y Posadillo (1920), José Ortega7 y Gasset (1918) y Ramón Menéndez Pidal8 (1917).
A través de 7 salas recorre la biografía y el legado intelectual y científico de Gregorio Marañón. Comenzando por sus orígenes familiares, su visión y manera de entender España, su concepción humanista de la medicina y sus aportaciones científicas y clínicas, su presencia en la vida pública española de su tiempo y su modo de entender el liberalismo, su obra histórica y la herencia que ha dejado la vida y obra de Marañón.
Marañón nació en Madrid el 19 de mayo de 1887 y murió en la misma ciudad el 27 de marzo de 1960.  Hombre austero, humanista y liberal, está considerado como uno de los más brillantes intelectuales españoles del siglo XX. Además de su erudición, destacó por su elegante estilo literario.
Como otros intelectuales de la época, se implicó política y socialmente: combatió la dictadura de Primo de Rivera y se manifestó crítico con el comunismo, apoyó en un primer momento la Segunda República aunque no tardó en criticarla por su incapacidad de aunar a todos los españoles, al posicionarse cada vez más hacia la extrema izquierda. Mantuvo en todo momento, desde su compromiso con la dignidad humana, una actitud crítica hacia los excesos de ambos bandos en el drama de la guerra civil española, lo que puso en grave peligro su vida.
Su contribución a la Medicina se centró pronto en la Endocrinología, de la que fue uno de sus precursores. Creó el primer tratado de Medicina Interna en España, junto con el Dr. Hernando, y su libro Manual de diagnostico etiológico (1946) fue uno de los libros de medicina más difundido en todo el mundo por su novedoso enfoque en el estudio de las enfermedades y por sus infinitas e inéditas aportaciones clínicas. Además de su dedicación intensa a la medicina, escribió sobre casi todo: historia, arte, la cocina, el vestido, el peinado, etc.
En sus obras analizó, con un género literario singular e inédito: "ensayo biologico", las grandes pasiones humanas a través de personajes históricos, y sus características psíquicas y fisiopatológicas: la timidez en su libro Amiel, el resentimiento en Tiberio, el poder en El Conde Duque de Olivares, la intriga y la traición política en Antonio Perez, uno de los hacedores de la leyenda negra española, el "donjuanismo" en Don Juan, etc. Fue admitido y colaboró en cinco de las ocho Reales Academias españolas.
Si bien la huella de Marañón es imborrable en el plano de la ciencia, lo que hace eterna, universal y aún más singular su obra es el descubrimiento y “describimiento" del plano ético, moral, religioso, cultural, histórico... en definitiva “humano”, que la acompaña. Hoy en día, lleva su nombre el mayor hospital de Madrid así como numerosas vías públicas e instituciones educativas de toda España.