viernes, 19 de marzo de 2010

Entrevista

Jordi Pujol cree que “Zapatero nunca ha dicho la verdad”

Madrid.- El ex presidente catalán Jordi Pujol dice en una entrevista con el semanario Tiempo, que cree
es el momento de Convergència, del “partido del lunes”, como uno de los eslóganes que le llevó a ganar las elecciones. Dice que el tripartito no tiene consistencia. Antiabortista pero a favor de una ley del aborto, el hombre que estuvo 23 años al frente de la Generalitat habla de sus memorias y repasa la actualidad política, sin olvidarse del polémico presidente del Gobierno español.
Por su innegable interés, reproducimos el contenido de esa entrevista para nuestros lectores:
Pujol (Barcelona, 1930) espera sentado en una mesa, en su oficina del Paseo de Gracia de Barcelona. “No sé por qué le he dado una entrevista, si no las concedo. Tendré que despedir a mi assistant”, espeta con ironía a la periodista nada más entrar. Y así establece las reglas de juego de esta charla. A sus 80 años, Pujol conserva intacta su lucidez política y sus dotes de mando, que dejará claros a lo largo de dos horas, no sólo con sus colaboradores, también con la entrevistadora. Zanja varias preguntas con un “porque sí” o un “porque no”. Sabe que se lo puede permitir. El president, como aún muchos lo llaman, mantiene una apretada agenda. Reuniones con ex compañeros de partido, charlas con líderes europeos, con profesores, etc. Mientras, busca tiempo para escribir la tercera parte de sus Memorias, publicadas por Destino en castellano y por Proa en catalán.
¿Cómo está y qué hace Jordi Pujol?
Me encuentro bien y estoy muy activo, leo, escribo. Acabo de volver de Estados Unidos de dar dos conferencias en las universidades de Princeton y Nueva York. Esos papeles de allí (señala una mesa) son el tercer volumen de mis memorias, que saldrán durante el primer semestre del año que viene.
En el primer volumen de sus memorias habla de su familia. ¿Qué parte de Jordi Pujol se debe a Marta Ferrusola?
Le debo mucho. Cuando decidimos casarnos yo hice un buen negocio. No estoy tan seguro de que ella lo hiciera. Es una mujer que vale, ha sido un gran apoyo siempre, con la familia y en la política. La familia ha salido bien gracias a ella. Es una mujer fuerte.
Dice: “Se puede decir que los hijos han salido bien, todos son nacionalistas y trabajadores”.
En ocasiones yo no he estado de acuerdo con mis hijos y creo que hubiera sabido aceptar que no hubieran sido nacionalistas. Lo que ocurre es que no se ha dado el caso. También son muy trabajadores, han estudiado, han procurado ganarse la vida. Estoy contento.
Tiene siete hijos. ¿Está en contra de la nueva ley del aborto o era necesaria esa reforma?
La legislación anterior tenía fallos, había gente que abortaba a los siete u ocho meses. Incluso Barcelona se convirtió en una capital del aborto. Convergència siempre ha dado libertad de voto. Todos sabemos, incluso los que somos antiabortistas, que hay una ley del aborto y que es necesaria. Soy antiabortista por diversos motivos, incluidos los religiosos. Pero tiene que haber una ley del aborto, tiene que reglamentarse bien. Hay quien puede pensar que no me ajusto a lo que desde la perspectiva de la fe religiosa debería decir, pero hay ciertas realidades que no se pueden dejar de tener en cuenta. En cambio, no acepto algunos argumentos poco responsables, incluso chapuceros, que a veces se dan a favor del aborto.

En sus memorias habla de la responsabilidad de Convergència respecto a Cataluña y España. ¿Sigue manteniéndola hoy?
Le contesto en términos personales, no en nombre de CiU. Convergència y CiU han tenido siempre un sentido muy agudo de la responsabilidad, más que cualquier otro partido. En Cataluña algunos, o muchos, están decepcionados. Estamos decepcionados. Otra cosa es que CDC vuelva a actuar responsablemente porque forma parte de su fórmula genética, pero no con la ilusión, ni la convicción de hace años. Actuamos con responsabilidad con UCD, con el PSOE y con el PP, en momentos de crisis económica, en la lucha antiterrorista, etc. La responsabilidad de CDC se ha aplicado desde 1977 de acuerdo con tres principios para dar estabilidad, continuidad y gobernabilidad a España. Sigue en esa línea, pero después de los últimos años, sin la ilusión ni la confianza de antaño.
¿A qué se debe?
Cataluña se ha sentido frustrada y engañada por el PP, por el PSOE y por las instituciones del Estado. Pero ahora mismo el único que ha hecho un discurso diciendo que hay que intentar un pacto ha sido CiU.
¿CiU perdió el sentido de Estado cuando empezaron a apoyar los referendos por la independencia?
No. El pueblo de Cataluña tiene que poder pronunciarse sobre esto, este sentimiento está progresando en Cataluña. Es lo que dice Montilla de la desafección. Las encuestas dicen que cada vez hay más gente que cree que debería haber un referéndum sobre esto. Aunque también hay una mayoría antiindependentista.
Nunca creyó en el pancatalanismo y dice que la independencia no era el objetivo. ¿Por qué? ¿Lo mantiene hoy?
El nacionalismo catalán hizo el siguiente planteamiento: vamos a entrar en una etapa de renovación del Estado español para conseguir una garantía de que Cataluña podrá conservar su identidad en sus instituciones, podrá forjar un proyecto propio y todo desde el marco constitucional español, que va a permitir que Cataluña pueda ejercer una opción positiva para dar servicio al progreso político, social, democrático, de integración europea de España. Esta doble posibilidad durante los últimos años se ha esfumado.
¿Por qué Artur Mas?
Vi en él tres cosas muy importantes. Es un hombre muy profundamente catalanista. Cataluña va a ser una prioridad para él, no va a renunciar a la causa de Cataluña por halagos, ni por lisonjas. Segundo, es un hombre riguroso, tiene exigencia, disciplina, racionalidad. Y, tercero, es un hombre de gran exigencia moral en lo personal, lo colectivo y consigo mismo.
¿Es su última oportunidad?
Cuando se ha ganado dos veces y no se es presidente, y llega la tercera y tampoco... se puede continuar, hay otros que lo han conseguido a la cuarta y quinta, pero se comprende que... bueno, esto ya no es cosa mía.
¿Lo conseguirá?
Confío en que sí y conviene y es que Cataluña lo necesita. Cataluña no va bien, tampoco España. Pero Cataluña no va bien porque le afecta la evolución general del mundo y la española y es porque no tiene un buen gobierno. El tripartito no es un gobierno con coherencia, ni sólido, ni que tenga trazada una línea que siga de forma consecuente. Ni tiene proyecto de país. Tiene que venir alguien que, sin prometer la luna, diga la verdad, cosa que, por cierto, Zapatero no ha hecho nunca, y estar dispuesto a asumir riesgos, a trabajar no sólo para el escaparate. En 1980 eso nos dio la victoria.
¿Y esa persona es...?
Artur Mas. En Cataluña, CDC dijo: “Lo hemos hecho bien, hemos restaurado la democracia y la autonomía, pero ahora tenemos que buscar a alguien dispuesto a levantar el país”. Uno de nuestro eslóganes fue: “Somos el partido del lunes”.
Y ganaron.
La fiesta mayor se acaba y mañana es lunes. Hoy quien puede ofrecer eso no es el tripartito, ni el PP, es CiU y Artur Mas. En Cataluña se necesita el partido del lunes.
¿Debieron los redactores del Estatut renunciar a la palabra “nación” para lograr el consenso de todos?
El Estatut con la palabra “nación” dentro ha sido votado en el Congreso después de pasarle el cepillo. PSOE, IU e ICV lo votaron y el pueblo de Cataluña lo refrendó. El PP no, pero tampoco su antecesora AP aceptó el Estatuto de Cataluña. Esa palabra no está sólo en el Estatut por iniciativa de los nacionalistas catalanes, está refrendada por la mayoría del Parlamento español.
¿Con quién prefiere que pacte CiU, con el PP o con el PSC?
Ha de aspirar a gobernar sola sabiendo que a lo mejor no puede, pero tiene que intentarlo. Sería lo mejor vista la experiencia. No me haga decir con quién porque no me corresponde.
¿De quién se fía más?
Con el PP hay un problema muy serio, pues ha presentado un recurso contra el Estatut y tiene una actitud muy negativa respeto al tema lingüístico, que es básico aquí. Confianza no tengo ni en el PP ni en el PSOE. Zapatero tiene un problema, ha engañado mucho. Y tanto los unos como los otros han descubierto que si, en un momento dado, mostraban el arma anticatalana, les resultaba.
¿Ni de ERC?
Su experiencia de gobierno ha sido mala. Pero lo cierto es que a nivel catalán se mantienen más los puentes de contacto y diálogo entre todas las fuerzas políticas.
En la operación Pretoria hay implicados dos ex altos cargos de CiU, Maciá Alavedra y Lluís Prenafeta.
Además de la presunción de inocencia, tengo que decir que son amigos, les tengo confianza y les estoy agradecido porque hicieron buenos servicios a la Generalitat en momentos decisivos.
¿Faltan valores en política? ¿Por qué los políticos son un problema para los ciudadanos?
No es sólo un problema de los políticos, sino de la sociedad. Ahora están de moda los valores líquidos, fugaces. Los valores sobre los cuales se basan las fidelidades y los compromisos están en desuso. Si en la sociedad imperan los valores líquidos, ¿por qué nuestros políticos van a tener valores sólidos?
¿Qué opina de la actitud del alcalde de Vic respecto a los inmigrantes?
Cataluña ha sido siempre un país de inmigración y muchas veces hemos sido más capaces de crear riqueza que población. Pero siempre hemos tenido una actitud de integración de forma respetuosa. Vic ha puesto de manifiesto la incoherencia e insinceridad de la política inmigratoria española, en realidad la ausencia de una política. A ver si esto obliga a una reflexión en serio. Ahora es Vic, pero ha habido conflictos en toda España. Quiero recordar que nadie pone en duda que durante años, y ahora mismo, precisamente Vic ha sido un ejemplo de políticas integradoras.
¿Qué legado ha dejado a los catalanes y cuál ha sido su mayor error?
El legado no me corresponde a mí decir-lo. Los errores los explico en mis memorias. Si Dios me da vida y salud escribiré otro libro, no en forma de memorias, pero para eso necesito vivir cuatro o cinco años más, que no sé si los viviré.