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CC.OO se queja de los servicios mínimos “abusivos” del gobierno regional para la huelga general

Toledo.- «No vamos a consentir bajo ningún concepto que el Gobierno regional intente truncar, debilitar o minimizar el efecto de la huelga con unos servicios mínimos abusivos». Así de tajante se mostró ayer el secretario General de CCOO en Castilla-La Mancha, José Luis Gil, ante la reunión que tendrá lugar hoy del comité de huelga de la Junta de Comunidades para negociar el establecimiento de los servicios mínimos para el próximo 29 de septiembre.
Ayer mismo llegó la propuesta del Ejecutivo con unos servicios mínimos a su juicio «abusivos», poniendo, como ya ocurrió dicen el pasado 8 de junio con la huelga de los empleados públicos, más personal que un día normal de trabajo.

De esta forma advirtió que «no todo lo público es esencial» y recomendó a la ciudadanía buscar alternativas porque «ese día, los niños y los jóvenes no tienen colegio» y en el caso de la Sanidad, que todo el mundo «vaya haciendo acopio de lo que necesite» siempre y cuando no surja una urgencia, tranquilizó.

CCOO quiere hacer ver así al Gobierno que ese día no puede ser considerado como una jornada normal y, ante la negociación de hoy para establecer los servicios mínimos, piden que estos sean los mismos que un domingo o un festivo para que no se cercene el derecho de ningún trabajador a hacer huelga. A pesar de todo José Luis Gil dijo estar tranquilo ya que había podido constatar que en los sectores estratégicos como Transportes, Sanidad o la Educación, «va a haber un huelgón».

Gil criticó la propuesta del secretario general de la CEOE a nivel nacional en laque solicitaba al Gobierno que ese día existiera una «línea caliente» directa para poder denunciar al Ministerio los excesos que se pudieran dar en los «piquetes informativos» a las puertas de los centros de trabajo, piquetes que por cierto Gil volvió a insistir que serían «contundentes».
Ante esta propuesta, señaló que ellos denunciarían antes «las coacciones que muchos empresarios están haciendo a los trabajadores para que no secunden la huelga».«No tengo ninguna duda de que, en todos los ámbitos, la huelga general será un éxito sin precedentes» apuntó Gil y reiteró que «las huelgas generales en este país siempre han dado sus frutos», por lo que no hay ninguna razón por la que el Gobierno no vaya a hacer una rectificación y recupere «el norte de la negociación».

La Unión de Pequeños Agricultores de Castilla-La Mancha (UPA) también irá a la huelga el 29 de septiembre. Su secretario general, Julián Morcillo, tiene claros los motivos: «Como organización agraria representativa de las explotaciones familiares nos consideramos como unos trabajadores más».

Morcillo ve que la reforma laboral propuesta por el Gobierno hace que «los derechos de los trabajadores se vayan al traste de un plumazo». Y no es lo único que no le gusta de cómo está gestionando la crisis Zapatero. Ayer criticó que las medidas que ha tomado «no están encaminadas a hacer pagar a los que han provocado esta situación».

Morcillo repasó que la subida de impuestos ha provocado un «incremento del coste de producción» para los que viven en el campo. Y además, está preocupado por la posible subida de edad de jubilación que estudia Moncloa. «Nuestra actividad se basa fundamentalmente en el esfuerzo físico y llevar la edad de jubilación por encima de los 65 años no tiene cabida», denunció. Por si le faltaban motivos, Lola Santillana, de CCOO, le recordó que el Gobierno ha incumplido su promesa de meter a los agricultores en el régimen general de la Seguridad Social.
Paralelamente se han detectado en un buen número de pueblos de la región, sobre todo en los que tienen alcaldías socialistas, presiones más o menos encubiertas para que los funcionarios y empleados públicos no sigan la convocatoria de huelga general.